¡ Vacío !
La actividad poética y la del juego infantil aprestan un montaje escénico y crean un universo singular al que se le atribuye certidumbre. Tanto el poeta como el niño, capturados en el trance de la actividad que les es propia, sin embargo no dejan de percibir que lo creado establece una delimitación escénica. Para el niño que juega, el universo lúdico lo sitúa en una disposición inesperada, en la que la infancia aparece como efecto de dicha actividad. Retomando la temprana observación freudiana respecto a que tanto el niño como el poeta crean un mundo singular, la obra de Miguel J. Lares, constituida por ensayos breves, analiza temáticas relativas al juego y la infancia. Juego y poesía se constituyen como lugar de una memoria, de una repetición y una pérdida, y es especialmente desde esa perspectiva que este libro está atravesado por una reflexión acerca de la voz. Juego e infancia abreva en el psicoanálisis, especialmente en algunos capítulos dedicados a la labor clínica del psicoanalista de niños.
